De acuerdo con la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera 2021, el 39 por ciento de la población adulta reportó tener una Afore, principalmente hombres.

La tenencia de cuentas de ahorro para el retiro es mayor entre los hombres con el 49 por ciento que entre las mujeres que representan el 31 por ciento.

Además, alrededor del seis por ciento de la población con una cuenta de ahorro para el retiro realiza aportaciones voluntarias. Este porcentaje, aunque aún reducido, representa un avance en comparación con lo reportado en 2018 y está concentrado principalmente entre la población con mayor nivel educativo.

Según datos de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) tener una cuenta de ahorro para el retiro en una Afore da beneficios como rendimientos competitivos y fondos vigilados y supervisados de manera estricta por las autoridades correspondientes.

Además de las aportaciones obligatorias, se puede ahorrar voluntariamente la cantidad que se desee, así como hacer retiros parciales o totales en el momento en que se desee.

Si la persona está próxima a pensionarse, la Condusef aconsejó actualizar o corregir los datos personales del Afore para asegurarse de que la información sea correcta.

Para ello se debe integrar el Expediente Electrónico Único, un archivo digital que contiene los documentos y elementos biométricos probatorios de la identidad del trabajador, necesario para realizar la mayoría de los trámites ante la Afore. También es necesario contactar al IMSS/Issste para iniciar el trámite de pensión.