Jesús Antonio Vargas (Enviado Especial)

Indonesia.- La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, advirtió un estancamiento en los niveles de crecimiento y un repunte de las tensiones comerciales y dijo que “los beneficios del crecimiento no se han compartido” pues en el mundo hay una desigualdad excesiva que se puede medir en aspectos como tecnología, comercio e integración.

Tal como ella lo percibe, las políticas que se diseñan tienden siempre a favorecer el capital por encima de la mano de obra y con esa actitud no se logra construir sociedad incluyente.

Al acudir a un lenguaje marino, Lagarde expuso que es necesario navegar bien de tal modo que el barco no se vaya a la deriva. Eso igual sucede con los países interesados en una mejor sociedad, que lograrán si son capaces de trabajar en forma de cooperación: “Todos somos hermanos y hermanas uno del otro y así como podemos ir en el mismo barco, lo importante es que este no quede a la deriva”, señaló.

¿Quién está seguro de. la fortaleza de la economía?, preguntó además la directora gerente del FMI, Christine Lagarde, al señalar que “la economía en su forma actual aparentemente es fuerte” porque está creciendo al 3.7% este año y similar en 2019.

Sin embargo, el crecimiento se ha estancado y no se da por igual para todos los países. Las crecientes barreras al comercio pueden afectar el desempeño de los países, aseveró.

De ahí que insistió en que es “necesario frenar las tensiones comerciales para que lleguemos a negocios justos que contribuyan a generar oportunidades para la sociedad en su conjunto.

Y la economía no está muy segura porque con la deuda pública tan alta y los riesgos de volatilidades, pueden venirse fugas de capitales de los países emergentes, alertó.

Insistió en que los países tengan políticas locales que sepan combinar con las del mundo para que no pierdan escenarios de trabajo.

Planteó la necesidad de una economía global que ayude a la sostenibilidad ahora cuando al mundo lo amenaza el cambio climático.

El tiempo se nos acaba y todos estamos llamados a ser coherentes con iniciativas sostenibles, de beneficio común para una humanidad que no quiere desaparecer, añadió.