Una encuesta publicada este jueves por la cámara de comercio AmCham Shanghai efectuada entre 306 miembros reveló que 47 por ciento, de los participantes revelan perspectivas optimistas sobre China para el próximo lustro, el nivel más bajo en la historia de ese estudio.
El 13 por ciento de las empresas estadounidenses eligieron todavía a China como su principal destino, mientras que un 25 por ciento recortaron sus inversiones en 2023, principalmente ante la preocupación por la ralentización del crecimiento económico nacional.
"Aunque se han anunciado muchas políticas positivas, todavía no han conseguido restablecer totalmente la confianza entre las empresas privadas o los consumidores en general", indicó en un comunicado el presidente de AmCham Shanghai, Allan Gabor.
Tan solo un 22 por ciento de los encuestados mostró confianza en el compromiso manifestado por las autoridades chinas de seguir abriendo sus industrias a corto plazo.
De hecho, más de dos tercios de las compañías participantes han impulsado una estrategia de "reducción de riesgos": por ejemplo, el 36 por ciento está invirtiendo en elevar la resistencia de sus cadenas de suministro y una de cada cuatro segrega ya la información y los datos provenientes de China de los de otros mercados.