El subsecretario para América del Norte en la Secretaría de Relaciones Exteriores, Jesús Seade Kuri, dijo que el arancel del 17.5 por ciento que impuso Estados Unidos a las importaciones de tomate mexicano es provisional.

Confió en que la medida que entró en vigor el pasado no afecte la ratificación del tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).

“Es un hecho que se aplique este arancel, pero es provisional porque para que haya un derecho antidumping se tienen que determinar dos cosas: que hay dumping, es decir, que se están vendiendo a precios artificialmente manipulados a la baja; y la segunda, que ese ejercicio daña a la industria del país importador”, explicó el funcionario.

Refirió que en Estados Unidos se llevó a cabo la determinación de dumping en el tomate, sin embargo, nunca se completó la investigación del daño, pues terminó por acuerdo de suspensión.

Afirmó que se continuará con la investigación del daño por parte de la International Trade Commission (ITC) cuyo fallo se espera sea en noviembre. Agregó que si en ese mes el resultado es favorable para México, se suspendería el arancel y se devolverían los cargos a los productores.

Respecto a las afectaciones que podría generar el arancel en la ratificación del T-MEC, Seade, dijo que no es algo que esté relacionado.

“Quizá en el escenario de México surja la furia, espero no demasiada. Pero en EU no veo que esté mezclado como en el caso del acero que está relacionado a cuestiones que fueron negociadas. El acero lo lleva el mismo grupo que lleva el T-MEC, pero el tomate es con los empresarios”, comentó.