“Si como estación gasolinera necesitas más de 2 pesos por litro para poder operar, y si te lo restringen con el tope de precios, entonces no te da para mantener la operación”, explicó Alejandro Montufar, director de la consultoría PetroIntelligence, quien estimó alrededor de 4 mil 827 estaciones de servicio estarían en riesgo de desaparecer, aunado a que la medida fomentaría el huachicol.
La cifra representa que 46 por ciento de las gasolineras estarán en riesgo de quiebra por el tope de 24 pesos por litro que el Gobierno federal pretende imponer a los precios del combustible.
Las estaciones más afectadas serían las que se ubican en Nuevo León con 542 estaciones, Jalisco con 441 estaciones, y Veracruz con 397, pero también otras entidades se verían impactas como Quintana Roo, Yucatán, Oaxaca, Sinaloa, Michoacán, entre otras.
El análisis se enfoca en aquellas estaciones que necesitan mantener un margen bruto de más de 2 pesos por cada litro de gasolina regular vendido, para asegurar su viabilidad financiera. “En contraparte, las estaciones que tienen un margen por debajo de 2 pesos por litro son las que sobrevivirían, porque sí les va a alcanzar”.
Al dividir el análisis entre marcas independientes y no dependientes, PetroIntelligence encontró que las no dependientes serían las más afectadas, con un total de 4 mil 199 estaciones que operan bajo este modelo y que se verían impactadas por el control de precios, porque requieren un margen mayor a 2 pesos por litro.
Con ello habría el riesgo de que repunte el huachicol, al orillar a las estaciones a adquirir el combustible en el mercado ilegal para mantener los precios bajos, lo cual también afectaría la calidad del servicio y del producto que recibirían los consumidores, poniendo en riesgo la integridad de los vehículos.