El gobierno entrante debe de respetar el Estado de Derecho y, si hay corrupción en las obras del Aeropuerto, se debe de castigar a los culpables y no a todo México al cancelarlo con el efecto que esto tendrá en la confianza de los inversionistas, advirtió el presidente del Centro Empresarial de Puebla (Coparmex), Fernando Treviño Núñez.

El Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAIM) al cancelarse provoca una pérdida de credibilidad del país, así como de prestigio como plataforma de inversiones, afecta el turismo, el comercio interno y externo, perdiendo los empresarios y los mexicanos todos.

Desde la perspectiva empresarial la consulta incumplió con los requisitos necesarios para su validez, careció de método, así como una serie de normas, no fue nacional y endoso a la población una decisión, cuando esta debió fundamentarse con estudios técnicos a fondo, aunado a que su resultado no es representativo pues no fue un ejercicio democrático.

Adaptar la base de Santa Lucía y los Aeropuertos de México y Toluca para cancelar las obras de Texcoco, con base en una consulta que no fue de carácter nacional pues ni siquiera cubrió uno de cada cinco municipios del país y tampoco tuvo candados que evitaran que la gente votará más de una vez, incluso hubo casos que lo hicieron hasta cinco veces, pone en entredicho la legitimidad de la decisión y del resultado del sondeo.

“Este resultado es ejemplo claro de que por unos cuantos supuestos beneficiados, ahora pagamos todos. Proponemos que en cuando Andrés Manuel López Obrador sea presidente en funciones, tome en cuenta todos los elementos necesarios, llame a rendición de cuentas a los involucrados del proyecto y sanciones conforme a la ley a los que deba hacerlo por actos de corrupción”, puntualizó el representante del Sindicato Patronal a través de un comunicado.