Debido al entorno geopolítico, comercial y económico global, Hyundai ha decidido redirigir la producción del modelo Tucson, fabricado en la planta de Pesquería, hacia mercados con los que México mantiene tratados de libre comercio. señaló la empresa.
Antes, The New York Post había señalado que Hyundai Motor creará un grupo de trabajo para hacer frente a los aranceles del presidente Donald Trump y trasladará la producción de uno de sus modelos más populares a Estados Unidos para evitar elevados impuestos de importación.
El fabricante surcoreano anunció que la fabricación de algunos de sus Tucson se trasladará de México a su planta de Alabama, y está evaluando la posibilidad de trasladar la producción de algunos vehículos con destino a Estados Unidos desde Seúl a otras ubicaciones.
La empresa reafirmó sus previsiones de beneficios y reportó un crecimiento del 2 por ciento en el beneficio operativo del primer trimestre: "Prevemos que las perspectivas comerciales se mantengan desafiantes debido a la intensificación de las guerras comerciales y otros factores macroeconómicos impredecibles", declaró Hyundai, cuyas ventas dependen en gran medida de Estados Unidos.
Sus ventas a concesionarios en Estados Unidos aumentaron un 1 por ciento, mientras que sus ventas minoristas se dispararon un 11 por ciento, ya que los compradores acudieron en masa a las salas de exhibición para comprar autos antes del impuesto a las importaciones de automóviles, que entró en vigor el 3 de abril.
Hyundai y su filial Kia, constituyen el tercer grupo automotriz más grande del mundo en términos de ventas; no obstante son particularmente vulnerables a los aranceles estadounidenses, pues aproximadamente un tercio de sus ventas globales se concentran en el mercado estadounidense y las importaciones representan aproximadamente dos tercios de sus ventas de automóviles en Estados Unidos, según datos de Korea Investment & Securities.