El presidente Andrés Manuel López Obrador aseveró que el robo de combustible asciende a 60 mil barriles diarios de gasolina, por lo que esta práctica conocida como “huachicoleo”, se combatirá dentro y fuera de Petróleos Mexicanos (Pemex), para lo cual, puso en marcha un plan conjunto en el que participan 15 dependencias federales, con el objetivo de evitar tal ilícito que se daba complicidad de autoridades.
Iinformó que lo que se roba cada año en gasolinas representa el presupuesto de la UNAM, 60 por ciento de lo que se destinará a las pensiones de adultos mayores y es 60 veces más lo que se invertirá en la creación de 100 universidades públicas.
La pérdida representa 60 mil millones de pesos, mientras que este año la cifra es similar, "significa 15 mil litros cada pipa, alrededor de 200 millones de pesos diarios".
De esta manera, el mandatario convocó a los trabajadores de Pemex, concesionarios, contratistas, así como autoridades estatales y municipales, y a los mexicanos en general "para que nos apoyen, nos ayuden a que se logre el propósito de cero corrupción".
Pidió a la población denunciar el llamado "huachicoleo" al número telefónico 01 800 22 89 660, y afirmó que se protegerá a quienes lo hagan para terminar con esta práctica que es un robo a bienes de la nación y a recursos públicos.
Como parte del Plan de atención a instalaciones estratégicas de Petróleos Mexicanos (Pemex), añadió que ya hay tres detenidos por este delito,
Dijo que hay la hipótesis de que del robo, sólo el 20 por ciento se daba por medio de la ordeña de ductos. "Era una especie de pantalla, la mayor parte tiene que ver con un plan que se opera con la complicidad de autoridades y con una red de distribución; son huachicoleros de abajo y huachicoleros de arriba".
Agregó que desde hace tres sexenios sabían del robo y se descontaba del ingreso de Pemex, además que en tres años el robo es el equivalente al costo de una refinería nueva.
"Los directores de Pemex tenían conocimiento, no puedo sostener con pruebas de que participaban, pero de que sabían, sabían. Hay hasta estadísticas, se contrataban sistemas para la vigilancia de ductos, para medir la presión de ductos, esto era casi de dominio público, pero no se conocía tan preciso de qué monto se perdía".
López Obrador dijo que se harán las modificaciones pertinentes a la Constitución para que el robo de hidrocarburos sea delito grave, sin derecho a fianza; también se buscará que se considere delito grave: la facturación falsa, el fraude electoral y la corrupción.
Reveló que algunas zonas en Pemex eran controladas por los sindicatos, por lo que nadie más tenía acceso a ellas, lo cual ya no pasará.
"Tenemos ya gente que está dando seguridad periférica, se van a incrementar los elementos para verificar el monitoreo y comprobación de procedimientos de abastecimiento y reparto. Tendrán acceso a las instalaciones, controlarán la entrada y salida de todos los vehículos y pipas, habrá un control de instalaciones y tanques verticales".
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