La inflación actual es un fenómeno global y que en el caso de México se explica en muy alta medida por factores externos. Aislarse de las presiones en los precios globales es muy complicado para una economía tan abierta como la mexicana y hay poco que el gobierno federal pueda hacer, estimó el analista de BBVA, Carlos Serrano.
Aseveró que diversas medidas del Acuerdo de Apertura Contra la Inflación y la Carestía (Apecic) pueden resultar contraproducentes como las restricciones a las exportaciones de productos como el maíz blanco, el frijol, la sardina, y la chatarra de aluminio y de acero, pues, argumentó, la experiencia internacional muestra que las restricciones a las exportaciones no suelen ser efectivas para reducir la inflación y que pueden resultar en efectos no deseados como son la falta de inversión futura (y menor oferta) en sus respectivos sectores.
Explicó que es menos atractivo invertir en la producción de un artículo y desarrollar capacidades logísticas para exportarlo si se percibe que se puede ser objeto de una prohibición a la exportación.
Además, se corre el riesgo de que los países socios comerciales puedan tomar medidas proteccionistas e imponer restricciones a la exportación de productos que México importa; lo cual aumentaría la inflación en los bienes que importamos o, peor todavía, conduciría a escenarios de escasez. Lo que implicaría un peor
equilibrio para todas las partes.
Recalcó que en un entorno de alta inflación global se necesita más y no menos comercio.
Apuntó que en el marco del Apecic grandes empresas distribuidoras se comprometieron a reducir en 8 por ciento el precio de 24 productos de la canasta básica, pero, estimó, no se logrará el objetivo, pues, millones de mexicanos no adquieren estos productos de las grandes empresas que se sumaron al acuerdo, sino que lo hacen, en especial las familias de menores recursos, en mercados locales que no se sumaron a este acuerdo y es difícil que las distribuidoras puedan no aumentar precios si sus proveedores enfrentan mayores costos que traspasarían a precios una vez concluido el acuerdo.
