El Departamento de Trabajo de Estados Unidos anunció recursos por tres millones de dólares para el proyecto "fortalecimiento de la sociedad civil para proteger y defender a los trabajadores migrantes", que proporcionará a la sociedad civil las herramientas y la capacitación para proteger a los trabajadores migrantes, en particular a los nacionales mexicanos que participan en programas de trabajadores extranjeros temporales en el vecino país.
Ello mediante el apoyo a iniciativas de contratación justa, la creación de conciencia sobre los derechos laborales y aumentar el uso de mecanismos formales para que los trabajadores ejerzan esos derechos.
En coordinación con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el proyecto considera la atención a los trabajadores extranjeros temporales, los cuales desempeñan un papel vital en la economía estadounidense al ayudar a los empleadores a cubrir puestos cuando no hay trabajadores estadounidenses disponibles.
Los participantes en los programas de trabajadores extranjeros temporales a menudo carecen de conciencia de sus derechos y de los mecanismos de reparación disponibles para ellos si sus derechos son violados.
Aún más, las trabajadoras migrantes enfrentan barreras para acceder a los programas y son más vulnerables a violaciones de sus derechos laborales, incluida la violencia de género y el acoso en el trabajo.