El Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) emitió una línea de crédito flexible por 100 millones de dólares a los Fideicomisos Instituidos con Relación a la Agricultura (FIRA) de Banco de México para apoyar la iniciativa del Bono Social de inclusión.

A través del financiamiento, el sector agropecuario, forestal y pesquero de México, particularmente las micros y pequeñas empresas, contarán con recursos para impulsar su desarrollo, capacitación y crecimiento.

CAF informó que esta alianza para la Emisión del Bono Social de Inclusión Financiera tiene por objetivo fomentar la inclusión financiera, abatir barreras de acceso a servicios financieros de las y los productores con énfasis en los de menos escala, promover el incremento en la productividad y eficiencia en todos los eslabones de las cadenas de valor del campo, así como contribuir al desarrollo del sector agropecuario, forestal y pesquero responsable y sostenible.

El director general de FIRA, Alan Elizondo, expresó que el préstamo otorgado por el Banco de Desarrollo de América Latina permitirá contar con una línea de crédito flexible para atender diversos proyectos del sector agropecuario, forestal y pesquero dentro del medio rural con un enfoque que reduzca la brecha de equidad, aumente su productividad y mejore el bienestar económico.

Por su parte, el gerente regional para México y Centroamérica en CAF, René Orellana Halkyer, destacó que este instrumento es innovador en América Latina, por su contribución para construir una política e inclusión financiera, la cual va dirigida a poblaciones rurales en estado de vulnerabilidad, y los respalda tanto para su crecimiento económico, como social.

La inclusión financiera tiene impactos directos e indirectos que contribuyen a reducir la brecha de inequidad, aumentar productividad y mejorar el bienestar económico, entre otros.

Se destaca que el 32% de la población entre 18 y 70 años, no cuenta con un producto financiero formal, esto es aproximadamente 25 millones de personas.

De hecho, el 53 por ciento carece de una cuenta bancaria, 69 por ciento está sin acceso al crédito y sólo ocho por ciento de los asentados en zonas rurales tienen un crédito.