Granjas Carroll de México ha donado 915 toneladas de biofertilizantes orgánicos entre 2022 y hasta el mes de mayo 2023, cpn la finalidad de recuperar los suelos agrícolas de la zona de Oriental y beneficiar a familias.
Para beneficiar a más de 50 agricultores del municipio de Oriental, Puebla, Granjas Carroll de México (GCM) ha donado 465 toneladas de biofertilizante orgánico, que se suman a las 450 enviadas durante 2022, con la finalidad de recuperar los suelos agrícolas de la zona y beneficiar a las familias.
A través de un acuerdo con el presidente municipal de Oriental, José Alejo González Carreón, así como con las áreas de Relaciones Públicas, Ambiente y Energía de GCM, se ha logrado impulsar la siembra de cilantro, rábano, lechuga y otras hortalizas.
El biofertilizante que dona Granjas Carroll es 100 por ciento de origen animal porcino a través de la cerdaza, que se ha convertido en un producto necesario para el crecimiento y desarrollo de las plantas, siendo su aplicación directa al suelo.
Fue a través de estudios biológicos realizados por la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), donde se determinó la efectividad biológica y, posteriormente, la SAGARPA -hoy SADER-. validó los resultados y dictaminó positivamente para su uso como fertilizante orgánico al que se le dio el nombre de Piglizante.
El biofertilizante favorece la retención de humedad en el suelo, tiene mayor biodisponibilidad de nutrientes para las plantas, ayuda a mejorar las condiciones del suelo para el desarrollo de la microbiología del propio suelo, además de que cuenta con un alto contenido de humus, y mejora las condiciones físicas y químicas del suelo.
Es elaborado mediante procesos naturales, se utilizan únicamente residuos orgánicos, se puede utilizar ampliamente en cultivos de gramíneas, aunque también en hortalizas y frutales y su uso es para todo tipo de suelos agrícolas.
Su obtención se logra cuando la materia orgánica es sometida a un proceso de digestión anaeróbica. Durante la degradación, se producen sólidos finos, los cuales se van sedimentando y acumulando durante al menos 5 años. Como resultado final se obtiene un fertilizante orgánico líquido estabilizado, rico en nutrientes y humus para aplicación al suelo.
Sus nutrientes son: Nitrógeno, fósforo, potasio, calcio, magnesio, azufre, hierro, manganeso, zinc y boro; de acuerdo a las pruebas de efectividad biológica realizadas, para este producto no se reportaron daños por fitotoxicidad a los cultivos, tal y como lo estipula el dictamen técnico SAGARPA INV-DT-107-18.
