Canacintra considera un error desaparecer Zonas Económicas Especiales

El presidente nacional de la Canacintra, Enoch Castellanos Férez, calificó como un error estratégico cancelar a las Zonas Económicas Especiales, pues representan una respuesta a la marginación de siete áreas del país donde se radicarían inversiones por 42 mil millones de pesos.

El representante de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), recordó que de ese monto, al menos ocho mil millones ya estaban virtualmente aterrizados, vía 86 cartas de intención para anclar proyectos productivos.

El análisis de la administración de López Obrador es superficial, pues se aplicó el mismo criterio para todas las zonas, en perjuicio del ecosistema de recursos humanos y empresariales que hubieran abonado a su desarrollo, incluido el aval de Banco Mundial, acotó.

Refirió que se habían armonizado leyes estatales y reglamentos municipales para darles viabilidad, creado ventanillas únicas, planes de simplificación y estímulos fiscales con respecto al resto del país.

Subrayó que en torno a las ZEE hay avances en Lázaro Cárdenas, Puerto Chiapas y Coatzacoalcos, que ya contaban también con Consejos Técnicos con representación público privada, así como sindicatos.

Ya se tenían tierras para el desarrollo de polígonos, así como cartas de intención, con 86 registros de industrias interesadas, informó.

El presidente de la Canacintra nacional se pronunció por dejar las Zonas Económicas Especiales para detonar inversiones cuantiosas que pueden vincularse con el Tren Maya y el corredor del Itsmo.

También vio con buenos ojos la inversión pública en diversas áreas, pero sin dejar atrás la participación del sector privado nacional y extranjero para acelerar el desarrollo económico.

En torno a un eventual escenario de desaceleración económica y recesión, descartó esta última, al apuntar que hay fundamentales importantes en torno a las reservas internacionales, líneas crediticias para México, la autonomía de Banco de México y las plataformas comerciales: “sería como detener a un tren a 200 kilómetros  por hora”, ponderó.

Sin embargo reconoció podría darse el riesgo de que se incumplan metas de crecimiento del cuatro por ciento anual, “lo que sería ideal”, pero es importante que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador de las señales adecuadas para que la inversión llegue y “ahorita no estamos dando buenas señales”.

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