El diferencial entre el precio doméstico y el internacional del azúcar, junto con la fortaleza del peso mexicano, ha permitido la importación de azúcar del resto del mundo a pesar del pago de arancel de 360 dólares por tonelada métrica, un proceso que podrá incrementarse en próximas semanas, advirtió el Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA).